¿Te gustaría adquirir un apartamento o una casa en un conjunto residencial, pero no sabes mucho acerca de lo que implica vivir en una propiedad horizontal en Colombia? Si tu respuesta es sí, ¡has llegado al sitio adecuado! En OIKOS Inmobiliaria, como expertos en todo lo relacionado con el mundo inmobiliario, vamos a compartirte a lo largo de este artículo todo lo que necesitas saber en torno a las viviendas catalogadas como propiedad horizontal. Desde qué significa ese término y qué ventajas ofrece, hasta qué ley regula este tipo de inmuebles, aquí te lo explicaremos todo. ¡No pares de leer!
¿Qué es una propiedad horizontal?
El término “propiedad horizontal” generalmente es utilizado para referirse a un conjunto cerrado de casas o apartamentos de tipo residencial cuyos propietarios conviven, comparten y se rigen bajo un conjunto de normas específicas. En una vivienda de estas características, cada individuo es dueño del espacio privado que compone su bien inmueble; este hecho le permite tomar decisiones sobre su propiedad de forma autónoma, personalizando y administrando su hogar según sus preferencias y necesidades particulares, sin superar los límites establecidos en el manual de convivencia.
No obstante, el aspecto distintivo de la propiedad horizontal radica en la coexistencia de áreas compartidas y comunes. En este entorno residencial, los propietarios están en la obligación de compartir y mantener diversos espacios como pasillos, jardines, amenidades (piscinas, gimnasios, salones de eventos, canchas múltiples, salas de juegos, parques, etc.), parqueadero de visitantes y portería. Estas áreas comunes a menudo son gestionadas, con recursos de los residentes, por la administración.
Aspectos positivos de las propiedades horizontales
En Colombia, cada vez son más los compradores e incluso los inversionistas, los que prefieren adquirir una vivienda en un conjunto residencial cerrado y ello se debe, entre muchas razones, a la variedad de ventajas que este tipo de inmuebles ofrecen en torno a:
- Amenidades compartidas: Uno de los mayores beneficios de las propiedades horizontales es el acceso a diferentes amenidades. Desde piscinas y gimnasio, hasta parques y zonas de recreación, todos estos espacios y más están a disposición de los propietarios. Estas amenidades están diseñadas para ofrecer un estilo de vida más cómodo a sus residentes, sin que ellos tengan la necesidad de desplazarse demasiado lejos de su vivienda.
- Mayor seguridad: La mayoría, por no decir todas las propiedades horizontales, cuentan con medidas de seguridad avanzadas. Desde la contratación y uso de empresas de vigilancia expertas hasta sistemas de control de acceso modernos, los conjuntos residenciales suelen brindar un ambiente más seguro y protegido a sus residentes.
- Menores costos por mantenimiento: Las responsabilidades de mantenimiento de las fachadas y las zonas comunes se comparten entre los propietarios. Esto significa que no tendrás que preocuparte por costear de forma individual el mantenimiento de las áreas comunes o paredes exteriores de tu vivienda, ya que el costo de estas tareas se distribuye entre los residentes de forma equitativa.
- Infraestructura y urbanismo planificado: Los inmuebles ubicados en conjuntos cerrados o edificios residenciales han sido cuidadosamente diseñados para ofrecer no solo un lugar para vivir, sino un entorno completo que mejora la calidad de vida de sus residentes. En un conjunto residencial, cada detalle es considerado, desde la disposición de las viviendas hasta la ubicación estratégica de las áreas verdes y las zonas de entretenimiento.
- Entorno controlado: La mayoría de estos conjuntos residenciales cuentan con regulaciones y normativas estrictas para garantizar un entorno limpio, seguro y agradable. Esto no solo beneficia a los residentes en términos de comodidad, sino que también contribuye a preservar el valor de las propiedades a lo largo del tiempo.
Reglamentos de una propiedad horizontal
La Ley 675 de 2001, también conocida como la Ley de Propiedad Horizontal, es una normativa en Colombia que regula el régimen de propiedad horizontal en edificaciones y conjuntos residenciales. Esta ley establece las normas y procedimientos para la administración, funcionamiento y convivencia en los conjuntos residenciales cerrados. Debido al papel que juega esta normativa, antes de adquirir una vivienda de este tipo, es crucial que conozcas los aspectos más básicos que esta ley establece:
1. Manual de convivencia: Cada conjunto residencial debe tener un reglamento de propiedad horizontal, que es un conjunto de normas internas que rigen la convivencia y el uso de las áreas comunes. Este reglamento debe ser aprobado por la asamblea de propietarios y debe ajustarse a las disposiciones legales.
2. Administración: La ley determina que anualmente se debe ejecutar una asamblea de copropietarios. En esta reunión se debe votar por quiénes serán los miembros del consejo de administración, del consejo de convivencia y el administrador: todos ellos serán los encargados de tomar decisiones sobre el funcionamiento y mantenimiento de las áreas comunes y del conjunto en general.
3. Mantenimiento y reparaciones: Los propietarios deben contribuir económicamente al mantenimiento y reparación de las áreas comunes y a la gestión y manejo del conjunto a través de un pago mensual, usualmente conocido por el nombre de “administración”.
4. Modificaciones y reformas: La normativa también establece un marco legal que regula cómo se deben llevar a cabo las reformas en el conjunto residencial y en el exterior de las viviendas que hacen parte de este. Por ejemplo, cualquier modificación que afecte las zonas comunes del conjunto debe ser aprobada por la asamblea de propietarios, así como los cambios que afecten la fachada o la estructura del edificio.
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Artículo tomado de: OIKOS Inmobiliaria
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