La inmobiliaria en Bogotá y en Colombia está viviendo un nuevo fenómeno en la compra y venta de apartamentos, casas y locales comerciales, puesto que los compradores y clientes en la actualidad adquieren casas o apartamentos en arriendo, así aseguran un ingreso fijo.
Pese a las cifras de crecimiento de los proyectos de vivienda, también se ve en auge los proyectos empresariales, construcción de oficinas y bodegas, cuyo objetivo es alquilar los espacios para obtener un retorno de la inversión a través de las utilidades generadas por el convenio.
Así mismo es una buena estrategia para las empresas constructoras e inmobiliarias para garantizar un retorno del capital invertido con la administración de inmuebles, eso sí dependiendo de las iniciativas que ofrezca la legislación nacional, con la cuales gane la inmobiliaria, el cliente y el arrendatario.
Sin embargo, la situación económica actual en el país, impide que esta alternativa desplace en un comienzo a la compra y venta de apartamentos o casas habitadas por el mismo comprador, ya sea por la falta de ingresos que permitan adquirir un bien inmueble o la falta de un sueldo estable que permita pagar un crédito hipotecario.
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