¿Cómo ha evolucionado la vivienda VIS en Colombia?

Las viviendas de Interés Social se han implementado como política para facilitar el acceso de vivienda propia a los colombianos. Dichas regulaciones se han ido transformando con el paso de los años con el fin de generar mayores beneficios, a continuación le enseñamos los puntos principales del tema.

Desde que la Ley 3 en 1991 orientó y reguló la política de vivienda en Colombia, la Vivienda de Interés Social se ha desarrollado como un sistema de subsidios a la demanda basado en las tendencias  internacionales sobre el sector. Desde entonces, durante estos años se han dado diferentes transformaciones que han llevado a que la política tenga una mejor orientación de los programas al público que los necesita, apoyo en los procesos y trámites para acceder a las casas y apartamentos VIS y en la calidad de los proyectos. 

  

¿Qué se busca con la vivienda VIS?

Los principios en los que se fundamentan los programas desarrollados son garantizar el derecho a una vivienda adecuada, el uso sostenible y equitativo de los recursos naturales y del suelo, y brindar opciones asequibles para las personas en situación de desventaja y garantizar la prioridad a los mismos. Es así como la calidad de los inmuebles se ha convertido en uno de los principales objetivos en el desarrollo de los programas VIS. 

Un comienzo con no muy buenas proyecciones

Durante los primeros años, de acuerdo a un estudio del Banco de la República, en el periodo de 1998 y 2001, la vivienda VIS tomó fuerza llegando a promediar un 40% del total de vivienda construida. Luego, entre 2002 y 2004, la VIS perdió dinamismo debido al déficit habitacional. Sin embargo, en ese momento, el gobierno trazó un programa para proveer subsidios para 100.000 unidades de vivienda.       

A pesar de estos subsidios, en esa época, las tasas de interés, relativamente elevadas, afectaron el acceso a los proyectos de vivienda de interés social y la economía de las familias que si accedieron a ellos generando altas carteras morosas. 

Cuando el segmento VIS se recuperó y disparó

Para el 2010, el promedio de unidades de vivienda para este sector fue de 74.080 por año, que fue el más alto hasta el momento, impulsando la consolidación del desarrollo de vivienda de interés social en el país. Esto, según la Revista Dinero, se debió a factores como la caída de las tasas de crédito hipotecario, una alta demanda insatisfecha, los subsidios a la tasa de interés y a la consolidación de un modelo de negocio eficiente de las grandes constructoras. Además, con la Ley 1151, que agilizó la gestión de suelos para la vivienda VIS, se plantearon macroproyectos que lograron que más familias colombianas de escasos recursos accedieran a vivienda propia. 

El fortalecimiento de los programas de vivienda creados por el Gobierno Nacional fortaleció la compra en este sector y reveló un panorama favorable. Para el 2015, el crecimiento de la asignación de subsidios fue de 56%, con cifras récord por parte de las cajas de compensación; en total se asignaron 65.175 subsidios, de estos, el 75% se otorgaron a trabajadores con ingresos menores a 2 salarios mínimos. 

Esto fue un notorio avance para la vivienda de interés social en Tunja y el resto del país, porque evidenció que cada vez más familias de estratos bajos pudieron acceder a diversos métodos de financiación para adquirir casas y apartamentos nuevos propios.

Panorama actual y proyecciones favorables

En la actualidad, después de un momento duro para el sector vivienda, este, ha comenzado a despertar y el segmento VIS marcha a buen ritmo. Según la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), durante los primeros seis meses de 2019, de las 85.860 unidades de habitacionales que se vendieron en el país, seis de cada 10 fueron VIS.

Para continuar impulsando este crecimiento, el Gobierno Nacional y Camacol, le apuestan a  garantizar recursos para los subsidios hasta el año 2024, con la aprobación del aval fiscal y el documento Conpes para los programas Mi Casa Ya y Semilleros de Propietarios, la utilización de los recursos de las cajas de compensación, para aumentar los subsidios de vivienda, y el aumento de la oferta, con el ajuste de los topes de los precios de Viviendas de Interés Social. 

Como las cifras lo demuestran, cada vez es más fácil para las familias colombianas acceder a oferta de calidad en vivienda de interés social para cumplir su sueño de tener casa propia. Si usted también quiere ser propietario de un apartamento, OIKOS Monteverde es la opción que puede elegir en Tunja, con unidades diseñadas para satisfacer sus necesidades. Conozca el proyecto y dé el primer paso para tener su vivienda propia.   

Artículo tomado de OIKOS PonteVerde.