Si quieres arrendar un local, debes tener en cuenta diferentes aspectos para que logre la atención de la gente. Por eso, en esta nota te compartimos algunos consejos con el fin de que elijas el sitio comercial adecuado para poner en marcha tu negocio.
Un proyecto de locales comerciales es ideal para generar ingresos extra y obtener estabilidad con un activo que te brinda rentabilidad. Si eres emprendedor, alquilar un lugar perfecto para mostrar tu producto o servicio es una excelente forma de darte a conocer y comenzar a enamorar al público objetivo. En este sentido, tanto si estás buscando un arrendatario o si eres tú quien está interesado en encontrar un sitio, debes tener en cuenta un par de consejos que te ayudarán a tomar la mejor decisión en este aspecto.
¿Qué hay que tener en cuenta al alquilar un local?
Antes de arrendar un local debes tener presentes tres factores principales que pueden influir en el éxito o fracaso del proceso:
1. Analiza tu público: intenta encontrar una locación a la que sea fácil llegar para que tu audiencia te encuentre con facilidad. Piensa si deseas brindar practicidad o si por el contrario tu local necesita de mucho espacio para diseñar áreas donde tus clientes puedan estar durante su tiempo de consumo.
2. Precio: fija el presupuesto que estás dispuesto a pagar luego de tus necesidades básicas. El mantenimiento de un local no es barato, por eso es necesario incluir el valor mensual, los servicios públicos y un monto adicional para cualquier eventualidad.
3. Papeles: todo lo que firmes debe estar en orden. Antes de tomar una decisión averigua que el propietario sí esté registrado y que el espacio tenga los permisos exigidos para ejercer actividades comerciales. Puedes llevarte una sorpresa o gastar dinero de más en caso de que las autoridades encuentren alguna irregularidad.
Aspectos legales a la hora de alquilar un local
Luego de verificar los ítems del apartado anterior, es necesario que tengas presente que en Colombia existe el Código de Comercio; en él se registran las disposiciones que aplican para los establecimientos comerciales al igual que su protección legal. Como en cualquier contrato, ambas partes deben cumplir con los deberes y a su vez pueden acceder a derechos gracias al soporte del documento firmado.
El arrendatario tiene derecho a la renovación cuando no ha incumplido el contrato, ha cuidado el inmueble y está el deseo expreso de continuar con la relación contractual. Pero, si en la propiedad se deben realizar reformas estructurales que afectan la seguridad de las personas, en ese caso, la reanudación del acuerdo no es posible y las reparaciones locativas van por cuenta del dueño del local. Asimismo, en el estatuto legal hay un tiempo establecido para la desocupación del sitio: en caso de que el contrato no siga el arrendante debe avisar con tres meses de anticipación y este es el mismo plazo con el que cuenta el locatario para abandonar el espacio.
El arrendador tiene la obligación de entregar en perfectas condiciones el local, también se debe encargar del mantenimiento a la propiedad y cumplir con las cláusulas establecidas en el contrato. Para el arrendatario, es responsabilidad pagar el monto acordado, cumplir con el uso para el cual se arrendó, cuidar del sitio y en caso de devolver el lugar, entregarlo en las mismas condiciones en que lo recibió.
Consejos para negociar un local comercial
La negociación de un local comercial es fundamental para optimizar tu presupuesto y obtener el mejor sitio a buen precio. Toma en cuenta estás pautas para lograr la mejor oferta:
• Investiga el sector: realiza una búsqueda en línea donde definas el rango que tiene la zona de tu interés, así sabrás qué valor mensual es justo. Ten presente que en ciudades intermedias puede ser más económico el canon. Por ejemplo, compara el precio de locales en venta en La Calera con sectores tradicionalmente comerciales de Bogotá.
• Comprende la zona en donde está ubicado: no todos los sitios están listos ni preparados para realizar una actividad comercial, algunos barrios solo tienen permisos residenciales o no cuentan con la infraestructura adecuada para ofrecer tu servicio o producto.
• Verificar propiedad: si obviamos este paso es posible que puedas caer en una estafa o que le entregues dinero a personas que no están autorizadas. Comprueba la titularidad de la propiedad y evítate sorpresas.
• Establece el monto a pagar: con la investigación del primer punto al igual que la verificación del propietario, ya estás listos para negociar con seguridad cuál será el pago y la periodicidad del mismo. Si observas que no es fácil llegar a un acuerdo, propón alternativas o algunos valores agregados que puedas ofrecer. En caso de que sea complicado finalizar el contrato, desiste y continúa con tu siguiente opción.
• Pactar garantías, duración, renovación y aumento: pregunta todas las dudas que tengas antes de firmar el contrato. Verifica que en el documento esté explícito los acuerdos a los que llegaron ambas partes. Solícita una copia y mantenla a la mano para tener presentes tus obligaciones y las de arrendador.
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